Mis parafilias favoritas (1º entrega)

Según Wikipedia, una Parafilia es "un patrón de comportamiento sexual en el que la fuente predominante de placer no se encuentra en la cópula, sino en alguna otra actividad. " Continúa diciendo que "Las consideraciones acerca del comportamiento considerado parafílico dependen de las convenciones sociales imperantes en un momento y lugar determinados. Ciertas prácticas sexuales, como el sexo oral o la masturbación fueron consideradas parafilias hasta mediados del siglo XX, aunque hoy en día se consideran prácticas no parafílicas, siempre que la actividad del sujeto no se limite únicamente a ellas. Por ello resulta imposible elaborar un catálogo definitivo de las parafilias. Las definiciones más usuales recogen comportamientos como el sadismo, el masoquismo, el exhibicionismo, el voyeurismo, la zoofilia, la coprofilia, la ncrofilia, el fetichismo y el frotismo (Que es algo que, al parecer suscito yo mucho últimamente en el metro).
En cuanto al origen de las parafilias, no se ha podido demostrar la existencia de ninguna alteración orgánica o psicológica que las explique. Eso si, las parafilias son, al parecer, diez veces más frecuentes en varones que en mujeres (para que luego la Cosmopolitan intente convenceros de lo complejas que sois en lo que respecta a vuestra sexualidad, chicas....)

"juego de amor prohibido", que diría el gran Eloy de la iglesia

La parafilia que nos ocupa en este caso enlaza con esa sentencia de la wikipedia que afirma el peso de la época, la moral, y las convenciones de la época a la hora de categorizar un impulso libidinal como tal: Se trata de los furverts, una parafilia devenida en movimiento cultural que designa la afición fetichista por los animales de peluche... En realidad, el texto que viene a continuación corresponde a una intervención mía a propósito del tema en un artículo a cargo de Popy Blasco para el EP3 titulado "Amor Bizarro" aparecido hace un par de semanas. Por cuestiones de espacio esta intervención quedó reducida a un par de sentencias, así que para eso está la blogosfera, (para verter basura, que es lo que nos gusta). El tema empezó a cocerse en el foro de tendencias y cool-hunting en el que ambos colaboramos a

partir de la pareja de diseñadores japoneses Kariwanz, de los que soy muy fan y ya hablaré otro día, que me conozco y enseguida lo lleno todo de links...

charcutero de milwaukee poniéndose al día en el

tema...

El caso es que la cultura furvert (o furry fandom si prefieren un término menos despectivo)tiene un factor tendencia muy fuerte, entendido como fenómeno cultural en auge, aunque en su esencia se trata de una parafilia de corte fetichista. El corte tendencioso que acarrea puede ser debido en parte a lo relativamente reciente del fenómeno (el fenómeno furry fandom empieza como tal a mediados de los 80) y a la naturaleza “social” de que hacen gala los furverts, los cuales, además de ser expertos internautas, pioneros en el reciente fenómeno de las llamadas "redes sociales", gustan bastante de juntarse en diferentes festivales y congresos… mi descubrimiento de este colectivo vino dado por mi trabajo de investigación en torno a lo que se suele denominar “estéticas de consumo”, es decir en los estilos de vida que solemos adoptar y en los códigos estéticos y de lenguaje que acarrean, ya sea en el ámbito de las subculturas juveniles o, en este caso, en los terrenos de la líbido... Los furverts median entre esos 2 terrenos. Aunque el perfil medio es de un adulto que supera la treintena es un fenómeno que se originó en el mundillo Nerd de las convenciones de cómics y cuyos artífices suelen ser la mayor parte de las veces Otakus fanáticos de mangas y videojuegos protagonizados por animales antropomórficos, aunque también es cierto que el universo Disney es para ellos un gran referente también...

En la sociedad en la que vivimos, el sexo es, de hecho, pura estética de consumo. No existe fetichismo que no tenga cientos de publicaciones, webs pay per view y dvd´s alusivos para colmar a los consumidores de pornografía... Los furverts son en cierta medida una pieza más de ese engranaje, pero con una peculiaridad. Aunque recalco que no tienen nada que ver con ello, de cara al gran público se mueven en un terreno bastante farragoso situado entre el mundo de las fantasias infantiles y la zoofilia, y eso es algo capaz de descuadrar hasta a la propia industria del porno…Me explico: ya que sus fantasias fetichistas provienen de asumir personajes de fantasía, con cánones, medidas y proporciones que no tienen equivalente en la vida real, el furvert se realiza en gran medida a través de internet, asumiendo un Nick y colgando sus muestras de “arte furvert” en portales como deviantart o youtube… Se trata de un colectivo con un marcado carácter creativo, ya que no solo se crean una identidad animal, sino que generan su propia “pornografía”, por así llamarla…

inocua promoción de un producto en su "super" de confianza

o ser humano degenerado a la altura del carretillero de

"espárragos carretilla"?

Hay algo más en este colectivo que los dota de cierto sentido poético… Se trata de la dimensión infantil de “animales amigos” que habitan. Cuando un furvert lleva puesto su fursuit se convierte en un performer que lleva a sus máximas consecuencias la identidad que ha adoptado, con las pautas de comportamiento intrínsecas a la especie escogida. Esto me recuerda a “los idiotas”, de Lars Von Trier, en la que un grupo de individuos de diferente extracción social se reúnen para realizar acciones que exploran la idiotez entendida en un sentido infantil de pureza, de "el idiota" como ser superior por encima de la moral, de las emociones, y sobre todo de las convecciones humanas… Creo que el furvert busca ese mismo grado de libertad, pero desde un cuerpo estético camp, muy de cultura Pop… Creo por tanto que lo suyo es una mezcla entre “los idiotas” y el cine de John Waters o Harmony Korine, y eso es algo que merece la pena ser admirado cuidadosamente…

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Cancion del día:

El gato y yo- Amanda Miguel